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Nada es... para siempre

Todo pasa, todo fluye, todo muta, nada es permanente, nada pervive... todo cambia

lunes, 31 de enero de 2011

Mi real Teatro de las sombras…

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entrar es fácil... salir es difícil

Por Paulee

Teatro de las sombras…

Strigo una vez dijo:…


“Strigo ha sido, es y seguirá siendo un vampiro cabal, un mutante, un personaje con lucidez de visionario, de verbo sin aritmética, anti esnobista, esotérico, cabalista, inexistente en la dimensión de lo normal, detrás del cual hay un ente dividido por un agudo filo en cuatro personas, dos hombres, un ángel-demonio asexual y una mujer. Kien pueda entender esto que lo entienda y kien no, ps no.”


Y yo lo entendí… y en sólo una cosa no se equivocó, es inexistente en la dimensión de lo normal…

De eso hablo ahora. Él, con su menuda videncia me admiraba, pero ella y yo lo hemos destruido… porque strigo llegó al teatro sin armas… confiado de su máscara que lo cubría… oculto bajo el maquillaje… juró que nadie reconocería sus lagrimas, supo desconfiar… pero no supo de QUIEN, sin darse cuenta… entregó sus armas para ir a su encuentro… y las depuso en manos, de aquella con quien se iba a encontrar dentro del teatro…

La función comenzó… y todo parecía la más bella de las obras… ante todos los espectadores, era una belleza de guión… lleno de abstracciones y metáforas, dramáticamente románticas… Strigolugius tenía miedo… de una u otra forma presentía, pero aun no entendía el porqué… y la obra siguió… sin sospechar que era, lo que pronto se abatiría sobre sí…

Al primer acto… todo el escenario se llena de vapores que simulan  dibujos animados... un tamborileo de redobles anunció un corto suspenso...
nada más la silueta de Strigo hace aparición en escena, destacada por un alucinante juego de luces... su voz es gutural, apagada, apenas se le oye murmurar:   - presiento una agonía - .
..un viento suave agita su capa de terciopelo mientras recita sus versos que rebullían con extraños giros de diversas entonaciones gimientes...

enseguida se cierra el telón… y el público aplaude emocionado lanzando pétalos negros... transparencias de vacíos y hervores subrepticios

Tras unos breves fogonazos de paroxismos relampagueantes, comienza el segundo acto… y todo se vuelve aún más bello, la magia crece en el escenario, y los dos actores saliendo de la penumbra, están embrujados de textos mutuos… de fondo se oye un misterioso responso, todos los asistentes se sienten otros en aquel secreto... 

termina el segundo acto… cae el telón y guerrera de la luz… sonríe satisfecha de los resultados… la enigmática Verena, sólo observa, ella es parte de sus encrucijadas

Pero definitivamente nadie sabría que viene para el tercero… Strigolugius aún nervioso con su exquisito aroma a cuero, perfecto peinado y oculto bajo sofisticados maquillajes… temía… temía de quien estaba teniendo frente a él…

al correr de la obra… Strigolugius se sentía desgarrado, amordazado y era prisionero… de sus miradas, de sus juegos, y de su máscara… pero era necesaria para observar en el silencio oculto de la sombra… y no ser reconocido… porque en ello pende su vida… sabía que debía detenerse,  pero el embrujo lo tenía ciego y embriagado… y no vio o no quiso ver…

Cuando de pronto… conociendo cada punto débil… la protagonista se vuelve antagonista de la obra… los papeles se invierten… y es ella… quien con las mismas armas que Strigo le entregó… alevosamente clava el puñal por la espalda… lo clavó con suave y sutil ademán… un dolor imperceptible… luego otro mas fuerte, luego otro y otro… así… hasta que extasiado… intoxicado… su cuerpo cae y queda inerme… 

Strigolugius… fue traicionado… y se ha desvanecido desangrado, exánime, ante los ojos perplejos de todos los espectadores…

Mientras tanto con el teatro en silencio… sumidos en el mudo llanto de la tragedia…

Strigo ya casi sin respirar… con el cuerpo invadido de fríos estertores… emite sus últimas palabras a punto de expirar:

- vos fuiste la ventana de mi túnel… vos fuiste quien llenó mis venas de sangre y la dejaste estacionar en cada suspiro de mi inmortalidad… vos me has dado… lo que nadie más me dio… lo que...

La antagonista con su rostro cubierto de lágrimas… responde:

- vos me salvaste la vida… vos has sido mi cielo, mi paraíso por completo… vos eres mi sol y mi esplendor…

-Esperadme!!!… que aunque te he traicionado…
Aún te amo… 
(Él abre sus labios, pero al instante queda inerte).

Ella, derramando sus últimas lágrimas se acerca, suavemente toma su cabeza… y lo besa con desesperada fruición como sí fuera la última vez…

Luego… alzando su voz hacia los espectadores del teatro… anuncia:

- ¡QUÉ ME CONDENEN A CIEN AÑOS DE TORMENTO!! ¡QUÉ ME CASTIGUEN SÍ TE BESO, ¡QUÉ ME CASTIGUE DIOS SÍ PECO Y GRITO AMOR!!!!! ¡SÓLO SÉ QUE ME EQUIVOQUE Y TE QUIERO!!!  

-I´M SORRY...  I´M SORRY... es lo que siento...


Se llega al final... Cierra el telón

 
Y el narrador se pronuncia diciendo:…

ahora el sueño y la muerte ya nada tienen que decirse… aunque no todos la comprendan a cabalidad, ahora ya todos conocen el origen de la pesadilla... 

progresivamente, sumidos en el mutis de hondas cavilaciones,  todos abandonan la sala

en tanto Strigo en estado cataléptico, lentamente es retirado en compañía de la nocturnal antagonista que sonreía vagamente haciendo chispear sus místicas pupilas, al lado de la enigmática y monumental amiga… engalanada de pálidas lágrimas fecundas… 

poco a poco en medio de una densa niebla sus siluetas se fueron desvaneciendo mientras se marchaban a un lugar inexistente…


Texto editado por Paulee. 
(Una edición especial que me apetece compartir)

.

domingo, 30 de enero de 2011

Una ciudad rabiosa

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entrar es fácil... salir es difícil



Me vi
en una ciudad rabiosa
sin paz
con sus esquinas grasientas
destrozando los sueños devotos

en la infinita mente
la forzosidad de lo imperfecto
páginas de una felicidad asimétrica
o de una película de horror... 

cordilleras de acechos
muros de rústicas garras
accidentes devoradores
ojo que sólo ve
piel bibliográfica
cansados dobleces

súcubos para sucumbir
recovecos
guaridas
cabeza de mazo
barajas, sin barajar
rodilla rota
codos muy al fondo del eco
la tierra aterrada

no está escrito
pero en un dos por tres,
esculpes supervivencia
difusa cordura
contra la amenaza grasienta
inaudito aullido
insuplantable 

no, no hay grandes titulares 
en las carteleras...
...en los diarios:
nada más lo fugaz
lo fúnebre
luto funesto
colgando del papel

.

sábado, 29 de enero de 2011

El frío desierto de todo lo que soy

.


entrar es fácil... salir es difícil 


…aquel súbito aire ardiente
que bajo la cortina de la disculpa
agita las tinieblas de mi pulso
mordiente latir
que se cuela entre las letras
para estar presente

aquel intervalo de caos
en mi celda
mueve mis dedos por un instante
sobre el silente teclado
en este fluir de vida que siento latir
en un absorto mundo invisible

es esta ansiedad reflejada en mis entrañas
esa angustia suspicaz
que se instala subrepticiamente
ese aire final
que se escapa a la luz de mis ojos

y aquel otro relámpago dulce y doliente
que con amargo dulzor
saboreo en mis labios
fruto de soles de siglos

este sigiloso aliento de vida...
este monótono soplo intemporal
que me asalta
renace y desfallece
en lo no vivido

el frío desierto de todo lo que soy
en toda mi extensión
en todo el espacio
de mi tiempo extinguido


.

jueves, 27 de enero de 2011

Un diminuto big bang

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entrar es fácil... salir es difícil



...nadie sabe
lo que es la belleza
de un instante
sólo el que lo vive

mucho menos de un instante 
que se volatiliza
tampoco sabe nadie
de que instante hablamos o de cuantos

a veces el sol brilla esplendoroso
mas solo por un momento
luego su luz sombría nos hiere
y el instante se torna lento


desfasado
angustiante
viscoso

insomne

somos apenas un breve latir
que agita el corazón
el latente sentir
que en la retina del alma retenemos,
entre luz y sombra

no es lindo que los instantes vividos
se nos escapen, o se mueran
pero en este instante
veo una luminosidad bárbara
que me habla con palabra cierta 
y siendo justa,  en su verbo me abraza
con deleite yo también
saboreo lo que dice...
en mis propios labios, sus labios
su aliento que me alienta
y me reconforta

es como un diminuto big bang
que me llena de luz para ser
eterno, como yo soy

.

martes, 25 de enero de 2011

Las oscuras aguas de la eternidad

.


entrar es fácil... salir es difícil


la tinta de mi ser es negra
en su oscuro pigmento flota mi alma
el primer trazo es un punto en el corazón
un agudo e intenso deseo de volar
su voz se unta sobre la hoja en blanco
donde tintinea cuatro veces
para seguir el camino elegido

una discreta máscara en la penumbra
muy cerca del borde del infierno
donde los códigos vierten sangre y carne
la intrépida sombra del destino
va rastreando sus precarios pasos

plegado en cúmulos de tinta
trata de escabullirse
escaleras abajo o escaleras arriba
pero la voz que vibra, bulle y lo asalta

fugaz, apenas vive un instante
el signo avanza en la savia del placer
en profundos giros florece y mana luz
hielo y fuego hacen el amor
dorado sueño de intercambios sutiles
la savia nutricia muere en lo inteligible

y cae danzando sobre el barro
con sus codos bien acodados
en cada cosa que digo
muy a pesar del azar
su locura rezuma semillas de vida
así la oscura belleza toma forma
su templo ya no es sólo un esbozo
ensimismada mi alma flota
sobre las oscuras aguas de la eternidad
en el dulce fragor del gozo



.

lunes, 24 de enero de 2011

La viuda negra

.


.
entrar es fácil... salir es difícil...


...un frío metálico vacío de certezas, pero sí, pletórico de notas estridentes se apoderó de mí cuando escuche su aguda voz al otro lado de la bocina... 

Al anochecer de mañana había planeado vestirme absolutamente de negro para salir, salvo una bufanda roja que me es imprescindible. Pero no, ha sido hoy. 

Hoy. Ella me ha llamado, me ha dicho que se ha pintado de rojo carmesí los labios y ha salido a deambular por las calles, finalmente paró en el Café Purshkin y desde ahí me ha llamado; su voz sonó arrogante al principio, después su tono era ansioso, desesperado.

- Me he pintado de rojo porque iba a encontrarme contigo y quería que me recordaras como la última vez, recuerdas que nos despedimos en un paraje oscuro en una hora azabache - ¿vienes?. 

Salí lentamente, no tenia prisa. De momento era hora pico y las calles estaban abarrotadas de transeúntes. La marcha ha sido tediosa, larga espera en los cruces, el ambiente tenso y perturbador, pero poco a poco a medida que me acerco voy recuperando el sosiego; las calles van quedando vacías, hasta quedar íngrimas…

Llovía cernido, con unos pocos escampes, luego ha quedado una brisa fría, pertinaz, que moja poco a poco y yo no llevaba paraguas. Sólo un gabán largo y unas gafas ahumadas de sol.

Finalmente, en este hoy la he visto. Tan soberbia y tan sombrí­a como siempre. Se marchó a los 33 años a Armenia y ahora ha vuelto. Altiva con aspecto de diva, aun joven y bien plantada. Vestida de negro, con un luto riguroso que da escalofríos.

Áspera y silenciosa, caminó a mi lado hasta el lugar donde ocupamos una mesa. No ha dicho nada durante la comida. Sus pupilas estaban demasiado dilatadas y parecía que tenía unas ganas tremendas de soltarse en  llanto. Pero después de un rato largo contemplándome parece haber encontrado cierto sosiego, ha pedido regaliz con tinta de calamar. Yo una copa de vodka negro. 

-“¿Para qué has vuelto?” - le espeté secamente. 
-siento que tenía siglos de no verte- dijo con cierto sigilo
y agregó - quería saber sí piensas de mí lo mismo, sí aún me deseas-
Luego, mientras le caí­an lágrimas negras, provocadas por el rimel espeso de sus largas pestañas, me ha contado que había estado perdida entre diamantes de sangre, que no había encontrado nada, ni tan siquiera a sí misma.

Lo de siempre: arrepentida de permitirse esos lujos. Viuda pura hasta la muerte como una araña glotona. Eso es lo que quería y lo que no quería querer.

-“¡Me siento como una viuda negra, me siento como una negra viuda!.
- ¡Estoy sucia, y soy sucia! ¡Infiel! ¡Incierta! ¡Viuda negra es lo que soy!”-.

La he consolado, no quiero que se sienta como un ícono mutilado de la belleza, junto a un vago trazado de recuerdos. No se cuanto tiempo la tuve en mi regazo, pero luego de tomarme un segundo vodka que esta vez mezcle con sangría me he ido sin despedirme. así de extraño soy a veces.

Me fui dejándola en la silla de la mesa del rincón del fondo, envuelta en su mantilla negra, en su oscura funda que no es más que un mundo ficticio de espejos y laberintos.

Un mundo que ya no tiene memoria ni se acuerda de la hija que tuvo (que lleva sus mismos oscuros genes). poco a poco su imagen se me  va desvaneciendo entre turbaciones y malabares...  Semejante al prestidigitador que con sus ilusiones nos trata de alucinar, así nos hallamos ante el enigma oculto de las cotidianidades que explotan y estropean nuestro caminar. Esa es su esfera sin hervor de vida. Un mundo lleno de irracionalidad y locura. Un pozo ciego que sólo ve lo que puede ver, lo que quiere ver.

Hoy me he vestido de negro y he salido a la calle. Ni tan siquiera sabía muy bien hacia dónde iba, tan sólo sabía que mi guía era la compasión, mis ganas infinitas de compartir mi pasión. Tan sólo sabía que llovía mucho, o poco, y no llevaba paraguas para protegerme. 

Al final todo bien pero mal. Un sabor de boca rojinegro, como siempre que la veía. Como siempre…
...

sábado, 22 de enero de 2011

Un portal de esta dimensión

.


entrar es fácil... salir es difícil


sin mencionar la historia de mis diarios
tampoco nada profético
nada más el pórtico de lo inmediato
para hacerse real
 sólo se necesitan
unas pocas letras en el contexto de la tinta
en secuencias estremecedoras e inconfundibles
clandestina puerta a los andamios del destino


un portal desde el que parten ases
y zetas, toda la gama de clones
ritmos de voces y sensaciones
códigos de tiempo y espacios
caracteres cifrados, cifras
permutaciones, mutuas
progresiones, cuerdas
latidos, secuencias
signos y figuras
pausas, pulsos
vibraciones
ondas
amor
luz

un portal de esta dimensión
hacia la fuente de pulsaciones
y milagros

.

martes, 18 de enero de 2011

Alas de coros entretejidos

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entrar es fácil... salir es difícil


deja el sepulcro, vence
tu carga de resentimiento…
oíste un disparo, una ráfaga
sentiste la garra de un lince
y el alma se te estremeció

una palabra explotó
y como un zombi cargaste voces
repitiendo
la mentira del viento
que te hiere o te acaricia

lees las cuartillas de la noche
alfarero de consonantes
filtras maravillas
entre las manos de arcilla
palabras torneadas en silencio
vocalizando lluvia
en un frasco de latidos

brillante boca de ojos sediciosos
voraces y ardientes
y te dejas llevar por ardides
ardores que arden sigilosos
ni más ni menos hondo
por los empinados tonos de la ofrenda

ritual
música
amor
alas de coros entretejidos
dolor, espina / sitial
de una eterna eternidad que te está llamando

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lunes, 10 de enero de 2011

Actores buscando su autor…

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entrar es fácil... salir es difícil


Aquí en el teatro de las sombras, no somos más que, actores buscando su autor…


soportando la felicidad
precipitándose en el remolino de luces
sin nada, sin nadie, sin donde


a veces los personajes se comen a sus autores… (así pasó con Strigo, devorado por su embrujo) me sorprende encontrarme de pronto en escena, es como si estuviera soñando… y en el sueño me despertaran para ver al autor... y entonces dejar que mi alter ego tenga un altercado con él


hay un hombre y también una mujer que apenas pueden verse por la distancia. Se acercan y me los figuro desarmados, pero no desalmados.

es tal vez por eso 
que permanecen
frente al mismo público
frente a la misma tragedia
perdiéndose el uno en el otro


ya no pueden comunicarse a través de sus máscaras, y yo me pongo a reflexionar sobre la caída de sus lágrimas, ajeno, enmudecido, particionado, ni siquiera hablo de mi participación...

hace unos momentos vi como más de una lágrima rodó y atravesó sus rostros. Él la miro mientras respiraba pausadamente, pero ella temía voltearse a verle, le temía a su vulnerabilidad por lo que supongo que las lágrimas de ella, sí eran para él…


pero… ¿quién es esa mujer que ahora, tras bambalinas, llora?
del libreto sale esta noche inmemorial
¿quién es el que llama a su puerta? / y ora...


en el escenario hay una sombra
que va de un lado a otro y se esparce
tejiendo una red infinita
las manos de ella se abren
como esperando algo del abismo
sin comprender el celo de los cielos



Ella sale al encuentro de su enamorado
ella nada más y el viento que gime y canta
la voz del deseo y el amor se entretejen
con trazos de encendida lumbre

algo se dibuja en el telón de fondo
donde algo trágico y sombrío clarea
por encima del fluir penetrante
de la pureza de sus lágrimas
de las cuales se desprende una gota
que rueda por el cuerpo hasta tocar el suelo


mas, extrañamente, por virtud de esa lágrima descubro la tragedia íntima de las gotas, porque justo cuando él iba a abandonarse al dolor que le desbarata por dentro, yo también vi una gota líquida, brillante, cristalina, bajando por la pálida redondez de su mejilla, y en ese instante miré que del otro lado del proemio llovía o quizás pasaba lo mismo, como si la lluvia también llorara su propia tragedia.


o como sin querer llorara la de ellos
como sí el autor destejiera la trama
y permitiera que las gotas 
con sus diminutos ojos
también estuvieran viendo
a través de un telón de cristal
pudiendo contemplar en cada gota
su propio apocalipsis…

.

jueves, 6 de enero de 2011

Gas estelar


entrar es fácil... salir es difícil
.

...gas estelar, estrellas fugaces
vientos mensajeros / racimos
que arden y alumbran


en el punto exacto
en que nos volvemos otros / que no nosotros mismos
en el momento exacto
en que aceptaríamos nuestra desaparición
por posesión
de lo imposible


por amor a lo que somos
o a lo que ni por asomo

un instinto arraigado en el punto de lo invalorable
lo gratuito
lo que se da por dar
lo que alegra la vida
lo que no puede ser guardado
retenido


(sin que estalle y nos carcoma a morir
en una vida insuficiente)


mi teatro son las máscaras que recogí en el camino
son las almas que me acompañan incesantes
sensibles
en crípticas marcas




des encadenar
el tiempo se hace no se padece
la clave de crear tiempo
desen cadenando
(des encanto)
cadenas de esto y de lo otro
la cadena de nuestro tiempo
que nos encadena a nosotros
mismos
siempre


tan iguales


tiempo desencadenado dentro de las cadencias
los ritmos repetidos
latentes latencias


que riegan el alma


torrentes
cantares
estelas
brillos

.
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